A pesar de que en las últimas semanas parecía estarse deteniendo la fuerte tendencia a la baja del valor del euro frente al dólar, esta semana ha empezado de nuevo con una caída constante. Llegando a un máximo de $1,2464, rápidamente se desplomó y empezó de nuevo una nueva caída que lo ha llevado a su cotización actual: $1,2266 dólares por Euro.
La recuperación mostrada por el euro en las últimas semanas no es para nada una tendencia que haya llegado para quedarse por mucho tiempo, sino apenas un momento de estabilización efímera. Por esta razón se espera que en el mediano plazo el euro continúe bajando constantemente, aunque quizá no lo haga con el ritmo que venía mostrando en los últimos dos meses, en los que fácilmente en uno o dos días perdía varios puntos porcentuales de su valor.
Será difícil para Europa restablecer la confianza internacional en su moneda ante la amenaza de nuevos problemas económicos en varios países de la eurozona. Nadie sabe por donde estallará de nuevo la crisis, pero todos están temerosos de que esto suceda pronto. Aún si eso no sucede, el nerviosismo que se siembra hace difícil la credibilidad necesaria para tener buenos niveles de inversión.
La recuperación mostrada por el euro en las últimas semanas no es para nada una tendencia que haya llegado para quedarse por mucho tiempo, sino apenas un momento de estabilización efímera. Por esta razón se espera que en el mediano plazo el euro continúe bajando constantemente, aunque quizá no lo haga con el ritmo que venía mostrando en los últimos dos meses, en los que fácilmente en uno o dos días perdía varios puntos porcentuales de su valor.
Será difícil para Europa restablecer la confianza internacional en su moneda ante la amenaza de nuevos problemas económicos en varios países de la eurozona. Nadie sabe por donde estallará de nuevo la crisis, pero todos están temerosos de que esto suceda pronto. Aún si eso no sucede, el nerviosismo que se siembra hace difícil la credibilidad necesaria para tener buenos niveles de inversión.